La muerte es una incógnita para muchos, y su existencia se establece paradójicamente dejando de lado a la propia existencia. El ingreso a la inexistencia nos conduce a la duda existencial, o sea, ¿después de la muerte, somos o no somos?
Mitómana mente, de Rolando Albornoz se presenta como un relato que pretende desnudar a la muerte y presentarla como ella es y no es, al mismo tiempo. El personaje principal que rueda a través de un mundo onírico, falso y verdadero a la vez, muestra al lector ese proceso temido por todo ser viviente, la muerte. Aparecen síntomas neuróticos y esquizofrénicos en una danza donde el personaje se siente insignificante, con un corazón corroído y una mente putrefacta. Al retrotraer a su memoria a quien fue su pareja sufre la añoranza y ve su muerte física. Aparece también su aspiración espiritual que le permita comprender, pero aun así, siente que lo real y lo irreal están ahí, y forman parte de la existencia eterna. En esas andanzas oníricas o mentales conoce a aquella por quien él está así. Se resiste, y la resistencia aparece una y otra vez, al principio y al final de la historia, la desesperación persiste. Esta obra requiere de varias lecturas para un proceso de asimilación, porque las estampas que se muestran son interdependientes y están aquí y allá. El rompecabezas puede ser armado de distintas maneras, en cada lectura, y tal vez no exista una lectura final… En estas circunstancias, la obra es una “rueda que gira” y que estimula a la mente a interpretar y reinterpretar. Y en cada lectura hay el goce de haber armado una nueva historia.
Rolando Albornoz, escritor boliviano, tiene su preferencia por lo onírico, y en ese ámbito ha escrito varias obras, como “La invasión de los seres salidos de la no existencia” y “Gustavo Lara Lafuente inagotable”. En ambas obras lo onírico se hace tangible, y el lector es conducido por una serie de laberintos que involucran experiencias, percepciones sensaciones, en un mundo que es una mezcla de realidad e irrealidad. Mientras el común de la gente podría decir que el sueño es simplemente eso,
Rolando Albornoz otorga a los sueños de un significado existencial muy peculiar. En Mitómana mente ese sueño es translúcido y vívido conforme una existencia circular y que da la impresión de que nunca se termina. Así, la obra de Rolando Albornoz es un relato fantástico que permite soñar despierto e induce a entrar en senderos desconocidos de los cuáles el lector saldrá maravillado. Por esto, Mitómana mente es una historia que vale la pena ser leída.
Referencia bibliográfica:
Albornoz, R. (2012). Mitómana mente. La Paz: Ed. Una Llama en el Infierno.